El primer ministro de Victoria ha anunciado que se mantendrá un bloqueo en todo el estado hasta que la mayoría de los residentes estén vacunados, pocos días después de que Australia adoptó una nueva legislación que otorga amplios poderes de vigilancia y espionaje a la policía. El estado australiano, con una población de 6,6 millones de personas, ha registrado 822 muertes relacionadas con el COVID desde el inicio de la pandemia, mientras más de 950 victorianos se han suicidado durante el mismo período de tiempo.
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Las medidas draconianas que cubren todo el estado del sureste de Australia solo comenzarán a aliviarse una vez que el 70% de la población reciba al menos una dosis de la vacuna Covid, decretó el miércoles el primer ministro Dan Andrews. El gobierno dijo que esperaba alcanzar este objetivo el 23 de septiembre o alrededor de esa fecha.
En una declaración escrita, Andrews afirmó que el levantamiento de las restricciones «invadiría» el sistema de salud del estado. Aunque, con una población de alrededor de 6,6 millones, Victoria actualmente tiene menos de 60 hospitalizaciones por Covid.
Todo el estado ha estado bajo estricto bloqueo durante casi un mes. Después de cerrar la actividad no esencial en Melbourne, Andrews decidió extender las restricciones a todo el estado el 5 de agosto, citando la supuesta detección de Covid-19 en aguas residuales a 236 km (147 millas) de la ciudad. Más tarde se vio obligado a admitir que las aguas residuales en cuestión habían resultado negativas para el virus. No obstante, el bloqueo en todo el estado, que se suponía que solo duraría siete días, se ha mantenido.
Actualmente, a los victorianos no se les permite aventurarse a más de cinco kilómetros (3,1 millas) de sus hogares, y solo para actividades «esenciales» . Andrews prometió aumentar el radio de viaje a 10 km una vez que se cumpla con el punto de referencia de vacunación del estado.
Las nuevas condiciones para aliviar el bloqueo se revelaron una semana después de que Australia aprobara un controvertido proyecto de ley que otorgaba a la policía la capacidad de incautar y alterar en secreto las cuentas de Internet.
Conocido como el proyecto de ley de Enmienda de la Legislación de Vigilancia (Identificar y Destruir), la legislación permite a la Policía Federal Australiana (AFP) hacerse cargo, modificar o eliminar las cuentas de los sospechosos de ciberdelincuentes.
Aunque las autoridades afirman que la ley ayudará a tomar medidas enérgicas contra los pedófilos, terroristas y narcotraficantes, muchos en las redes sociales expresaron su preocupación de que los amplios poderes fueran una prueba más de que Australia se deslizaba hacia el autoritarismo.
El estado australiano ha registrado 822 muertes relacionadas con Covid desde el inicio de la pandemia. Para poner esta cifra en perspectiva, más de 950 victorianos se han suicidado durante el mismo período de tiempo.
Se ha culpado a las draconianas restricciones del estado de alimentar una crisis de salud mental, especialmente entre los jóvenes. Si bien solo un australiano de 19 años o menos ha muerto por o con Covid-19, ocho adolescentes se han quitado la vida en Victoria en los primeros siete meses del año.
🔎 | RTNews