En un informe que se hará público a finales de esta semana, se acusa a Pfizer de pagar a expertos para difundir mentiras, desafiar y desacreditar la calidad de la vacuna COVID producida por su competidor AstraZeneca.
- Los investigadores patrocinados por Pfizer hicieron muchas afirmaciones falsas en diapositivas sobre la vacuna de la competencia.
- Se afirmó que una inyección de AZ podría causar cáncer y resultar amenazadora cuando se administra a algunas personas.
- También se informó que Pfizer necesitaba solo 76 centavos para fabricar su vacuna, que se vende en el Reino Unido por £ 22.
- Las acusaciones están siendo realizadas por Channel 4 como resultado de una investigación que se emitirá a finales de esta semana.
- Pfizer ha rechazado todas las acusaciones de que ha trabajado para socavar a otros.
Se cree que Pfizer financió una presentación en la que el orador afirmó que una inyección de AZ podría causar cáncer y era peligrosa para los pacientes con sistemas inmunológicos debilitados, informó el Daily Mail.
Se dijo que el discurso se llevó a cabo en un seminario educativo en Canadá el año pasado, pero los detalles de cuántas personas asistieron o si fue simplemente un evento aislado aún no están claros.
Las afirmaciones bastante dañinas se aclararon en una investigación de Channel 4 que se emitirá el viernes por la noche.
Pfizer negó explícitamente las acusaciones de que estaban tratando de socavar la vacuna AZ, diciendo que la presentación se «atribuyó erróneamente» al gigante estadounidense de los medicamentos y fue construida por un tercero.
Otra cosa que surgió de la investigación fue el hecho de que los costos de producción de la vacuna Pfizer eran de tan solo 76 peniques por inyección. Sin embargo, Pfizer cobra al gobierno del Reino Unido 22 libras esterlinas por dosis, lo que representa un aumento de casi el 3.000 por ciento sobre el costo de producción.
A principios de este año, los profesionales de la salud en Canadá recibieron información sobre la tecnología utilizada en la vacuna Pfizer en la presentación.
Según los informes, las conversaciones contenían una serie de diapositivas llenas de información supuestamente errónea, incluidas afirmaciones de que la tecnología de la vacuna que usó AZ podría resultar en que la vacuna en sí se incorpore al código genético del receptor y cause un tumor.
El profesor Sir Andrew Pollard, director del Oxford Vaccine Group, que desarrolló la vacuna AstraZeneca, negó las acusaciones y advirtió firmemente sobre los peligros que podría causar la difusión de información errónea sobre su vacuna.
“Existe un gran riesgo de desinformación, porque cualquier cosa que haga que las personas duden sobre la vacunación puede poner en riesgo sus vidas”, dijo.
“Puede socavar e impactar en las decisiones que las personas toman sobre su propia salud, pero también crear incertidumbre para los legisladores”.
“Rechazamos cualquier sugerencia de que Pfizer haya intentado socavar los esfuerzos científicos de otros”, declaró un portavoz de Pfizer en respuesta.
“Nuestra prioridad siempre ha sido hacer llegar vacunas de alta calidad, bien toleradas y eficaces a los pacientes de todo el mundo lo más rápido posible y ayudar a poner fin a esta pandemia mortal”.
Pfizer financió a una agencia externa con un comité científico independiente para lanzar un programa de educación sobre vacunas en Canadá después de que la vacuna de la compañía obtuvo la aprobación en el país, dijo el portavoz.
Pfizer lo hizo después de «numerosas solicitudes de profesionales de la salud canadienses», dijo el portavoz.
La investigación de Channel 4 también encontró que el contrato de Pfizer con el Reino Unido resultó en su imposibilidad de ser llevado ante los tribunales en caso de una disputa legal entre el gobierno del Reino Unido y Pfizer.
Como alternativa, Pfizer y el Reino Unido han logrado acordar un panel de arbitraje secreto.
El Reino Unido está legalmente obligado a no decir si está en disputa con Pfizer, de qué se trata la disputa o cómo resultará el arbitraje secreto.
El Reino Unido aparentemente sigue siendo el único país desarrollado que ha aceptado cumplir con esta demanda de la compañía farmacéutica.
Pfizer lidera el número de vacunas ordenadas en el Reino Unido y Europa.
La investigación sobre Pfizer se produce como resultado de que las partes interesadas de la compañía se embolsaron lo que se estima en 3.9 mil millones de libras esterlinas en ganancias del último frenesí de vacunas causado por la llegada de Omicron.
Las acciones de los gigantes farmacéuticos aumentaron un 7,4 por ciento en los siete días hasta el 30 de noviembre después de que Sudáfrica advirtiera al mundo sobre la ‘nueva cepa’ el 24 de noviembre.
En las semanas posteriores al descubrimiento de Omicron, la firma de inversiones Vanguard Group Inc recaudó la mayor cantidad de dinero de las acciones de Pfizer, con lo que su valor total ascendió a 1.300 millones de libras esterlinas.
Albert Bourla, director ejecutivo de Pfizer, supervisó el aumento de sus acciones en casi 257.000 libras esterlinas durante toda la semana.
🔎 | DailyMail | GreatGameIndia
La de Pfizer se desacredita sola. Vaers y EMA.
Creo que en lo referente a las «vacunas» coronavirus tenemos que tener siempre en cuenta como factor más sospechoso, llamativo y significativo, que todas son idénticas, casi idénticas, producen el mismo efecto y seguramente tengan el mismo origen (creador).
Para opinar esto me baso en las declaraciones acerca del biomagnetismo, que parece estar siendo causado por absolutamente todos estos sueros, ya sean occidentales, chinos, rusos, latinoamericanos, asiáticos en general, e incluso… ¡cubanos!
Esto es sorprendente. Muy sorprendente. Pero me da en la nariz que es una pieza clave para entender toda la mascarada.