Los exprofesionales del fútbol de Inglaterra, Matt Le Tissier y Trevor Sinclair, expresaron su preocupación por el patrón de quejas repentinas de «dolor en el pecho» de atletas profesionales presenciados en los últimos meses.
Mientras el mundo observa el colapso de los atletas profesionales de todo el mundo a un ritmo alarmante, otros tres futbolistas europeos se han visto obligados a abandonar el terreno de juego a principios de esta semana después de sufrir episodios repentinos de dolor en el pecho.
Esto ha proporcionado más combustible para la especulación de que las condiciones están relacionadas con las inyecciones contra el COVID.
Los futbolistas profesionales Piotr Zielinski, Martin Terrier y Victor Lindelof, los cuales compiten con equipos de primer nivel en las ligas europeas, quedaron fuera de juego en la última semana debido a la aparición repentina, pero aparentemente inexplicable, de problemas respiratorios y de pecho.
El mediocampista del Napoli Zielinksi se vio obligado a salir del campo después de solo 16 minutos de juego durante un partido de liga de la Serie A del domingo. El Daily Mail informó que el joven de 27 años se quejó al personal médico al principio del juego de que estaba experimentando dificultades para respirar y «se le vio sujetándose el cuello, tosiendo y haciendo gestos de que le costaba respirar».
Los dirigentes del club en Napoli declararon que el mediocampista dio negativo a un PCR después de ser tratado fuera del campo. Un informe de octubre en Football Italia sugirió que alrededor del 98 por ciento de los miembros del equipo de la Serie A habían recibido una inyección contra el COVID, aunque se desconoce si Zielinski eligió vacunarse..
Terrier, un delantero de 24 años del club Rennes de la Ligue 1 francesa, se vio obligado a abandonar el partido del domingo contra el Niza después de sufrir un dolor en el pecho paralizante a los 30 minutos de iniciado el partido. Se puede ver al delantero sosteniendo su pecho mientras es escoltado por un equipo de médicos.
Apenas 24 horas antes, Lindelof, defensor del Manchester United de 27 años, fue sacado de la cancha, también agarrándose el pecho, luego de recibir tratamiento en el campo durante un juego el sábado.
«Durante más de 10 minutos, su frecuencia cardíaca fue más alta de lo normal y estaba un poco sorprendido por esto, así que tuvimos que reemplazarlo», dijo el gerente interino Ralf Rangnick.
La esposa de Lindelof compartió una actualización de la condición del jugador en las redes sociales diciendo: «Ayer hizo muchas pruebas y tiene un monitor cardíaco encendido durante dos días para asegurarse de que todo esté bien». Más tarde confirmó que ella y su esposo deportista habían recibido la vacuna contra el COVID.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU. reconocieron la correlación entre la miocarditis, una inflamación peligrosa del tejido cardíaco y las inyecciones de COVID desarrolladas por ARNm en junio, declarando una «asociación probable» entre los dos.
De hecho, el Sistema de Notificación de Eventos Adversos de Vacunas (VAERS, por sus siglas en inglés) administrado por los CDC documenta unos 16,918 casos tanto de miocarditis como de la condición relacionada con la pericarditis (inflamación del tejido que rodea el corazón) después de los pinchazos contra el COVID desde diciembre de 2020.
La reciente aparición de colapsos y dolencias repentinas se produce tras el paro cardíaco que puso en peligro la vida de la estrella del fútbol danés Christian Eriksen durante un partido de la Eurocopa 2020 en junio. Eriksen, de 29 años, se sometió a una operación para instalar un ICD (desfibrilador cardioversor implantable) después del incidente, que ayuda a corregir los ritmos irregulares enviando un pulso eléctrico al corazón.
En consecuencia, el jugador ha rescindido su contrato con el Inter de Milán de primera categoría, ya que las reglas en Italia prohíben que los deportistas profesionales con un ICD practiquen deportes de contacto.
La superestrella argentina Sergio Agüero, de 33 años, anunció su retiro del fútbol profesional en una emotiva entrevista este miércoles luego de ser trasladado de urgencia al hospital debido a dolores en el pecho y problemas respiratorios durante un partido en el mes de octubre.
El delantero del Barcelona había recibido la vacuna contra el COVID y era un partidario abierto de las inyecciones, promoviendo la aceptación entre los niños de 12 años en una publicación local española.
Los informes sugieren que Agüero se sometió a una operación cardíaca a la edad de 15 años, lo que podría haber contribuido a su condición actual.
Los exprofesionales del fútbol de Inglaterra Matt Le Tissier y Trevor Sinclair expresaron su preocupación por el patrón de quejas repentinas de dolor en el pecho en atletas profesionales presenciados en los últimos meses.
Sinclair también comentó sobre el impredecible episodio de Lindelof al publicar deliberadamente un sarcástico «No hay nada que ver aquí» en Twitter.
Sinclair fue silenciado previamente en la radio en vivo después de que sugirió que el colapso repentino de otro jugador de fútbol podría estar relacionado con una vacuna contra el COVID-19:
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